Es
un postre que sorprende, pues aunque estamos acostumbrados al sabor de la pera,
del café y de la canela por separado, verdaderamente la mezcla de los tres,
resulta original y exótica. Pruébalo y me darás la razón. ¡Ah!
Y muy sencillo de hacer.
Ingredientes
- 6 peras
- 1 l de agua
- 3 cucharadas soperas de café soluble instantáneo
- 5 cucharadas soperas de azúcar
- 1 rama de canela
Preparación
Las peras han de ser más bien pequeñas y alargadas, si las queremos hacer enteras; dentro de la variedad Conferencia se encuentran bastante finas. En caso de ser un poco gorditas, será mejor partirlas al medio en sentido longitudinal.
Las peras han de ser más bien pequeñas y alargadas, si las queremos hacer enteras; dentro de la variedad Conferencia se encuentran bastante finas. En caso de ser un poco gorditas, será mejor partirlas al medio en sentido longitudinal.
Poner
en una cazuela el agua, el café, el azúcar y la canela; mientras se va
calentando, pelamos las peras dejando el rabito.
Una vez que haya hervido un par de minutos, introducimos las peras y ponemos el fuego al mínimo y tapada la cazuela; de vez en cuando giramos las peras para que el café bañe todas las caras.
Una vez que haya hervido un par de minutos, introducimos las peras y ponemos el fuego al mínimo y tapada la cazuela; de vez en cuando giramos las peras para que el café bañe todas las caras.
Aproximadamente
en dos horas, el líquido empezará a espesar. Cuando tenga la
consistencia de la miel, lo retiraremos del fuego. ¡Y listo!
Lo serviremos añadiendo una generosa cucharada del café convertido en especie de melaza muy aromática, por encima de la pera.
Lo serviremos añadiendo una generosa cucharada del café convertido en especie de melaza muy aromática, por encima de la pera.
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